Algo más que una fotografía
La presencia del Rey Felipe VI en los actos del Día Internacional de los Bosques, promovido por Juntos por los Bosques y celebrado este año en Galicia en colaboración con entidades y asociaciones gallegas, ha supuesto una inyección de moral para una buena parte de lo que podríamos denominar sector forestal. Al menos, lo ha sido para las más de treinta asociaciones que forman parte de Juntos por los Bosques, una plataforma que en muy poco tiempo ha conseguido representar los intereses comunes de la mayor parte de las familias forestales. No es baladí, más bien al contrario, es un logro importante haber conseguido una plataforma desde la que trabajar por el reconocimiento político y social del valor de los bosques y su aportación a la calidad de vida de todos los ciudadanos, con el objetivo de impulsar el crecimiento de la actividad forestal como motor de desarrollo rural y estructuración del país.
Y ¿después de la foto, y el subidón de alegría que ha provocado, qué? Esta es la cuestión que necesita respuesta.
La visibilidad que pueda dar la afortunada presencia del Rey en una procesadora de madera, imagen alejada de la típica y tópica bienintencionada plantando un árbol en alguna zona periurbana, es una oportunidad de propaganda que no debe quedarse en unos cientos de mensajes en redes sociales, convertidas, dicho sea de paso, en círculos ya convencidos, más o menos cerrados, con poca capacidad para expandir fuera sus mensajes.
La imagen está muy bien para consumo interno, pero está mucho mejor para conocimiento externo al sector. No puede ser una imagen para la autocomplacencia. Debe salir a la sociedad para que conozca, entienda y comparta que el aprovechamiento sostenible de los bosques, su gestión, es imprescindible si quiere seguir disfrutando de un medio natural sano que nos proporcione los servicios ambientales y los bienes naturales, ecológicos y renovables que nos dan los bosques.
El anuncio del coordinador de Juntos por los Bosques, Eduardo Rojas, de promover “un gran pacto por los bosques que sepa responder a la oportunidad histórica que tenemos por delante” parece de lo más apropiado, aunque no será tarea fácil. Estamos en período electoral y los partidos políticos son especialmente sensibles a recibir información y propuestas que puedan incorporar a sus respectivos programas electorales. Pero la experiencia reciente nos indica que una cosa es incorporar promesas en un programa electoral y otra muy distinta cumplirlas una vez que se alcance el poder, incluso con mayoría absoluta en el Parlamento para aprobar las leyes necesarias.
No por eso hay que dejar de intentarlo y menos cuando los problemas que acucian al Planeta y a nuestra sociedad en particular, como el cambio climático, la contaminación por no apostar por la bioeconomía, o la despoblación rural necesitan de la aportación de los bosques para su solución.
Y para lograr ese pacto, una imagen, sin ser la solución, sí que puede aportar el impulso necesario para lograrlo.
Mientras, será necesario seguir construyendo una casa común donde los intereses legítimos de cada miembro puedan compartir un interés común. Requerirá del esfuerzo de todos, una visión de futuro que vaya más allá de lo inmediato y un mínimo de generosidad para trabajar por el bien general sin que ello suponga renunciar a los intereses particulares.
Ismael Muñoz
@Ismaelnatura

La forestales asistentes al acto le pidieron al El Rey Felipe VI posar con ellas como reivindicación del papel de la mujer en la gestión de los bosques