El abandono rural, la falta de gestión forestal y el cambio climático amenazan los bosques
Con motivo del Día Internacional de los Bosques, el Colegio Oficial de ingenieros Técnicos Forestales quiso llamar la atención sobre las amenazas que se ciernen a nivel global sobre los bosques. Para los ingenieros forestales son tres: abandono rural, la falta de gestión forestal y el cambio climático, “que traen consigo pérdida de gestión del territorio, pérdida de biodiversidad, de cultura tradicional y de posibilidades de desarrollo para nuestro país”.

Aprovechamiento de biomasa como prevención de incendios, fines energéticos y gestión sostenible de los montes
El cambio climático está, a su juicio, “acelerando el deterioro de los bosques españoles y debemos actuar a la mayor brevedad para no llegar a una situación irreversible”. Sabido es que los bosques son el principal sumidero de carbono terrestre, así que son a la vez parte de la solución y quienes más pueden sufrir las consecuencias de este cambio. Según el COITF, “el cambio climático está provocando movimientos de numerosas especies de flora y fauna a lo largo y ancho de la Tierra y ha provocado o provocará la extinción de las más sensibles”. Por ello, cree necesario “una estrategia común y global en la gestión forestal para cuidar y perpetuar nuestras masas forestales y proteger así nuestros bosques”.
La gestión forestal, por su capacidad para incidir directamente en el medio, con actuaciones dirigidas a adaptar los bosques a las nuevas condiciones y hacerlos más resilientes mediante “la selvicultura del carbono o la selvicultura adaptativa”, y por su capacidad para crear empleo y ayudar al desarrollo rural, es la herramienta propuesta por los ingenieros. “Mantener unos montes en buen estado contribuye claramente a mantener la capacidad de la naturaleza para mitigar los efectos negativos del cambio climático, siendo mucho más rentable que sustituir esos servicios perdidos por soluciones tecnológicas humanas mucho más costosas y menos sostenibles a largo plazo”.
Los compromisos de la Unión Europea de reducir las emisiones de carbono para 2050 en un 80 % con respecto a las emisiones de 1990 plantea un reto de “descarbonización de la economía donde los bosques deben contribuir de forma contundente con su potencial de secuestro”
Señala el COITF a la ciencia forestal como la herramienta que aportará el conocimiento sobre el que debe basarse la gestión de los bosques. Y apela a la responsabilidad de las administraciones públicas para “el mantenimiento y conservación de nuestro medio natural que garantice servicios básicos para la vida como el oxígeno, agua, recursos naturales renovables y biodiversidad”. Reclama el COITF mayor inversión pública para desarrollar esa gestión forestal, creadora de puestos de trabajo “que posibilite el progreso y bienestar de nuestros pueblos abandonados. La pandemia que ahora sufrimos delata la gran vulnerabilidad del mundo urbano frente al rural y un serio aviso que nos alerta de que algo estamos haciendo mal. Nosotros revindicamos y apostamos por mitigar y revertir la despoblación del mundo rural”.