“Lo ideal sería sustituir grandes incendios forestales por incendios pequeños controlados”

El fuego técnico provocó en un primer momento tanto rechazo entre los profesionales forestales como en la propia sociedad. Dar a conocer sus ventajas e inconvenientes, los detalles de su utilización y manejo correcto permite conocer la herramienta, eliminar prejuicios y facilitará su utilización por otros dispositivos de extinción.
A eso se dedicó Federico Grillo, jefe de Emergencias del Cabildo de Gran Canaria, en una de las jornadas informativas del “Café forestal” que organiza el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Forestales.
El fuego técnico no el bálsamo milagroso que todo lo cura, pero sí es una herramienta más que ofrece ventajas que ninguna otra da.

Federico-Grillo-premios-coitf-osbo

Federico Grillo, cuando recibió en 2021 la Mención de Honor del COITF

El fuego prescrito no es un invento de hace dos días, llega a España en la década de los años noventa del siglo XX, aunque en Estados Unidos empieza unas décadas antes.

El fuego ha estado relacionado con el ser humano desde siempre, ha sido una herramienta utilizada con muchos objetivos. Sin embargo, a raíz de que los incendios forestales se convierten en un problema social a mediados del siglo pasado, se impuso el enfoque de intentar acabar con todos los incendios, con todos los fuegos.

Las influyentes campañas de comunicación contra el fuego en la década de los ochenta fijaron en la mente de buena parte de la población que el fuego es algo negativo per se. Fuego e incendio se convierten en lo mismo para la sociedad. Federico Grillo lanza al comienzo de su charla la primera idea “no podemos combatir todos los fuegos, esto origina una carga de combustible que facilitará antes o después un gran incendio forestal”.

A medida que avance su charla ampliará el mensaje en una dirección que puede chocar a muchas personas “el incendio hay que gestionarlo, no solo apagarlo. Hay que pensar en dejar incluso que se queme en función de las necesidades y de lo que queremos en un futuro”. Incendios que no se apagan, que se dejan evolucionar bajo control, un concepto que va más allá del fuego técnico.

quema-prescrita-bajo-arbolado-trex-osbo

Quema prescrita bajo arbolado durante los ejercicios Trex de Almería 2019. Foto I. Muñoz

Aunque la isla que más ha utilizado las quemas prescritas es Gran Canaria, Federico considera que aún están muy lejos de lo deseado, “lo ideal sería sustituir grandes incendios forestales por incendios pequeños controlados”. Hasta llegar a ese punto de gestión de incendios, Federico Grillo considera que «es necesario hacer muchas más quemas” en Gran Canaria, pero “no se dan las condiciones por la ley de estabilidad presupuestaria, no podemos incorporar a más personal”.

Frente al debate que siempre polariza las respuestas, Federico considera que no se trata de “quema sí o quema no”. Insiste varias veces en que es necesario comenzar de forma lenta “y la quema se vende por si misma mostrando sus efectos”.

Se muestra partidario de la gestión selvícola manual “pero la realidad es que hay mucho terreno y poco dinero. Hay que generar bioeconomía porque genera más empleo y actividad económica pero el monte no productivo no lo permite. No podemos renunciar a ninguna herramienta, tenemos que utilizar lo que tengamos a nuestra mano y las quemas son una herramienta más que tiene que implantarse de forma tranquila y comprobando resultados continuamente”.

«No podemos renunciar a ninguna herramienta, tenemos que utilizar lo que tengamos a nuestra mano y las quemas son una herramienta más que tiene que implantarse de forma tranquila y comprobando resultados continuamente»

Federico da una recomendación a aquellos técnicos que quieran utilizar por primera vez el fuego prescrito en su territorio, “en Gran Canaria empezamos con quemas experimentales muy pequeñas de una hectárea. Trabajamos de la mano con ecologistas y gestores, es fundamental compartir conocimientos y hacer partícipe a la sociedad. El mayor rechazo lo tuvimos precisamente del sector forestal”.

Las circunstancias socioeconómicas y la relación social con el fuego se deben tener en cuenta cuando se planifique la utilización del fuego como herramienta de gestión. “Cada territorio tiene su ecología, su historia y tradición respecto del fuego y no podemos obviarlo”.

¿Cómo se puede gestionar el fuego?

trex-andalucía-quemas-monte

Prácticas de quema durante el ejercicio internacional TREX en Andalucía en 2019. Foto I. Muñoz

“Una quema es como una nave con sus mandos, debes ser capaz de conducirla. Todo se ejecuta de acuerdo a un plan de quema. El gestor del monte debe ser el interlocutor más importante para hacer la quema”, comenta Federico.

Una quema prescrita o la utilización del fuego técnico no es algo tan sencillo como llegar con una antorcha y una autobomba, pegarle fuego a la parcela y vigilar para que no se escape el fuego delos límites fijados. Es una herramienta que requiere conocimiento, experiencia y destreza, pero bajo una planificación y organización de funciones, objetivos y responsabilidades.

“Lo fundamental es trabajar con seguridad, no solo para que no se escape el fuego, sino por el humo o por el daño que puede hacer su intensidad”. Por eso considera Federico que es importante disponer de una buena estructura que “dependerá de las dificultades y número de igniciones que tengamos un dispositivo mayor o menor”.

Y recuerda que la planificación y reparto de responsabilidades es fundamental para evitar problemas. “El jefe de quema es el máximo responsable de todo lo que suceda, puede llegar a tener responsabilidad penal”.

“Una quema es como una nave con sus mandos, debes ser capaz de conducirla. Todo se ejecuta de acuerdo a un plan de quema. El gestor del monte debe ser el interlocutor más importante para hacer la quema”

Aunque para el gran público una quema pueda parecer algo muy homogéneo y brusco, “la antorcha puede ser un bisturí formando líneas, puntos, tomando una dirección u otra lo que permitirá no quemar especies protegidas, por ejemplo, dirigir la quema hacia donde se desee y lograr distintos objetivos”.

trex-andalucía-antorcha

Foto I. Muñoz

Cada parcela necesita un tipo de quema, una forma de ejecutar en función de la vegetación, pendiente, orientación, tamaño, objetivos y circunstancias. “El arte del quemador está en moverse por la parcela a la velocidad y con la técnica necesaria. Prácticamente necesitas toda una vida para controlar el punto de ignición”.

Los resultados de las quemas también necesitan de mantenimiento, en el caso de Gran Canaria Federico señala que “entre tres y siete años suele ser necesario repasarlas”. El índice de humedad óptimo en el que realizan las quemas es del 45 %.

Aunque en la isla hay muchas zonas con microclima, de julio a septiembre se paran todas las quemas. “Es una herramienta más, no siempre se puede utilizar”, y pone el ejemplo de la laurisilva “a la que no la va bien el fuego”.

El coste de esta herramienta de gestión es uno de sus puntos fuertes para Federico. “Mientras que la eliminación de restos en pinar con orografía abrupta en Gran Canaria puede ascender a 4.000 €/ha, el coste de quemas asciende a 1.000 €/ha, 70 €/ha cuando se realiza en pastizales”.

¿Qué condiciones deben exigirse a una quema?

Grillo enumera las condiciones imprescindibles que debe tener una quema prescrita.

– Debe ser ecológicamente beneficiosa
Eficaz, es decir, debe cumplir los objetivos para los que se hace.
Económica frente a otras herramientas
Socialmente aceptable. “Es uno de los grandes problemas, sobre todo donde hay mucha población con una gran sensibilidad ambiental muy sesgada”. Federico señala una de las necesidades: “hay que educar a la sociedad y a los compañeros, a biólogos y ambientalistas o tendremos un gran rechazo por hacer la quema”.

trex-andalucía-quema-escalonada

Foto I. Muñoz

La preparación del personal que utiliza el fuego técnico es también una de las cuestiones más importantes. “La formación es fundamental. Creo que son necesarias unas 1.800 horas de quema para que el personal tenga experiencia y destreza en el manejo del fuego. Necesitamos tiempo para que la destreza del personal nos permita conseguir grandes rendimientos”.

Sobre la forma de ejecución en Gran Canaria, en función del modelo de combustible, Federico comenta que, en ocasiones, es necesario un tratamiento selvícola previo. Antes de hacer la quema “se hace una línea de defensa, lo que permite estar concentrados y simular situaciones reales” con la intención de mecanizar protocolo y actuaciones para el próximo incendio real.

Comentó Federico los distintos usos que le han dado al fuego técnico en gran Canaria, desde la obtención de pastos para ganado, la quema de rastrojos, el matorral de los campos abandonados, la quema bajo arbolado “respetando el dosel del arbolado”, o las quemas para cazadores “que requiere que no se elimine el matorral porque es refugio de fauna y caza”.

La gestión del humo es importante. Tener el detalle de avisar a los vecinos para que cierren ventanas o recojan la ropa tendida ha permitido que, en algunos lugares, como Artenara, hayan pasado de recibir críticas “a solicitar las quemas ellos mismos todos los años”.

Huyendo de dogmatismos en todo momento Federico Grillo compartió la experiencia del dispositivo del Cabildo de Gran Canaria y señaló un camino que requiere de continuo aprendizaje. “Somos la generación de ingenieros que ha introducido las quemas. Dentro de 20 años vendrá otra generación que lo mejorará”.

El Café forestal se podrá ver en abierto próximamente en el Canal de Youtube del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Forestales y Graduados en Ingeniería Forestal y del Medio Natural..