La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, asegura que ni ADIF ni Renfe recibieron información sobre el incendio de Bejís
Ni ADIF ni Renfe tuvieron notificación alguna de la incidencia del incendio de Bejís sobre la infraestructura ferroviaria. La ministra de Transportes Raquel Sánchez compareció ayer en la Comisión Permanente del Congreso de los Diputados para explicar lo sucedido cuando el tren que viajaba de Valencia a Zaragoza se adentró en el incendio de Bejís (Castellón) y varias personas resultaron heridas, dos de ellas aún permanecen hospitalizadas con quemaduras de distinta consideración. Su comparecencia exime de responsabilidad a las empresas estatales y parece descargar la responsabilidad en la administración autonómica o provincial en la gestión de la emergencia.

Raquel Sánchez, ministra de Transportes
La ministra corroboró la versión de la maquinista: que no tenía ninguna información que le avisara del peligro ni de que la vía estuviese afectada por las llamas; que paró el tren y pidió permiso para regresar; que volvió hacia la cabina de cola para comenzar el regreso a la estación anterior; que durante su paso por los vagones informó sin éxito a un grupo de pasajeros de que no rompiesen las ventanillas de seguridad, ni utilizasen el freno de emergencia, ni abandonasen el tren. No tuvo éxito porque algunos pasajeros tiraron del freno de emergencia, rompieron alguna ventanilla y salieron del tren. Todas estas acciones retrasaron la vuelta del tren a la estación de Caudiel.
Según la ministra las empresas estatales cumplieron con los protocolos de seguridad y no fueron informadas del incendio ni del cambio drástico de las condiciones del mismo. Aseguró que “el tren hizo el mismo recorrido por la mañana sin ninguna complicación”. Lo cierto es que el incendio llevaba varios días abriendo los informativos de radio y televisión nacionales por “su comportamiento explosivo” que le hizo pasar de 600 hectáreas a 3.700 en apenas dos horas; por las constantes condiciones cambiantes del viento y las distintas evacuaciones de pueblos y cierre de carreteras.
La gestión del puesto de mando avanzado y, por tanto, la dirección de la extinción era responsabilidad del Consorcio de Bomberos de la Diputación Provincial de Castellón. Pero, a nivel autonómico, la gestión de las emergencias es responsabilidad de la Agencia de Emergencias de la Generalitat Valenciana 112. Por otra parte, dentro del puesto de mando avanzado están representadas todas las administraciones con responsabilidad en la gestión de este tipo de emergencias, desde las locales a las nacionales, pasando por las autonómicas. Todas podían disponer de la información que se generaba en cada momento.
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, anunció el encargo de un informe que esclareciese lo sucedido y las responsabilidades pero no ha trascendido nada de ese informe. El caso está judicializado en el Juzgado de Burriana (Castellón)
Distintos grupos parlamentarios señalaron que había evidencia de fallos de coordinación y comunicación entre las administraciones. Reprocharon que se señalase indirectamente al Consorcio de Bomberos de la Diputación de Castellón como responsables de dar el aviso cuando hay una agencia de emergencias autonómica y que se busquen responsabilidades en la maquinista cuando “ese tren no debió salir nunca de Valencia”, señaló el diputado del Grupo Popular Óscar Clavell.