La DANA del 29 de octubre ha provocado graves daños en el Parque Natural de la Albufera de Valencia. Residuos como plásticos, cañas, envases de productos químicos, neumáticos y electrodomésticos han sido arrastrados hasta el parque. Este espacio natural está incluido en la Red Natura 2000 y en la lista Ramsar de humedales. Lamentablemente, ha sufrido un impacto ambiental "excepcional", según el Ayuntamiento de Valencia.
Lo avanza hoy 20 minutos: la zona norte, donde se encuentran nueve municipios, ha sido la más afectada. La limpieza continúa con la retirada de más de 750 metros cúbicos de basura, en colaboración con las comunidades de regantes.
El desastre natural que vive la Albufera | Europa Press
Una catástofre natural sin precedentes
El conseller de Medio Ambiente, Vicente Martínez Mus, visitó el parque hace unos días. Destacó los trabajos para eliminar los restos arrastrados por la riada. El informe municipal advierte de los daños en áreas de alta conservación, esenciales para la fauna, incluida la de especies en peligro.
Los residuos contienen elementos tóxicos como aceites, gasolina y pesticidas, lo que amenaza el ecosistema acuático. Según los expertos, el coste de restauración podría superar los 9,58 millones de euros.
El nivel de inundación fue histórico. Más de 120.000 millones de litros de agua llegaron al parque en menos de 24 horas. Los técnicos han señalado que esto fue un aumento del 50-70% respecto al volumen habitual anual. Esta gran cantidad de agua ha ocasionado enormes daños en el ecosistema y las infraestructuras agrícolas.
Los análisis preliminares no muestran niveles altos de contaminación química. Aun así, expertos como el profesor de Ecología de la Universitat de València, Antonio Camacho, alertan sobre los riesgos de sustancias industriales y residuos químicos.
Los sistemas de alcantarillado y saneamiento también han sido gravemente afectados. Esto podría generar contaminación microbiológica. A pesar de todo, la Albufera ha ayudado a mitigar los daños con su "efecto esponja", al absorber y evacuar parte del agua, lo que evitó mayores consecuencias en otras zonas. Los expertos aseguran que la recuperación de la Albufera será un trabajo conjunto y coordinado entre las administraciones y universidades.
La cosecha de arroz de 2024 no se verá afectada, aunque los daños en el norte de la marjal son considerables. Algunas zonas del sur siguen intactas. La comunidad de regantes de la Acequia del Oro asegura que la cosecha de este año fue recolectada antes de la riada. Sin embargo, las infraestructuras hídricas necesitan reparaciones urgentes.
Los daños en acequias y caminos de acceso a los campos de arroz son graves. Se estima que las reparaciones costarán alrededor de 700.000 euros.
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